A veces no soy yo, busco un disfraz mejor.
Como aquellas noches en las que solo pensaba en cuerpos descuartizados, sangre y vísceras y todo me recordaba a ti. Madurar no es la palabra, cambiar, o avituarse.
Todo parece tan distinto para acabar siendo igual.
Pienso en fresas, nueces y nubes blancas en un cielo negro.
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1 comentario:
habituarse cariño, habituarse.
espero que no sea yo el que te recuerda a visceras y sangre... costillas rotas y guantes choriceados si pero viceras...
eso aún no ;)
pasa res, coses meves. adewww
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