Momentos de lucidez tomando café.

Tantos pensamientos vienen a la vez que no sé cómo afrontarlos. Te paras, respiras y piensas. No. Así no es como se hace. O sí? Espera, no no no no, no puedo llegar a recordarlo. Intenta imaginarte algo, recuerda algo, invéntate algo, un simple pensamiento, e intenta crear algo con lo que te sientas a gusto a partir de eso. Aunque es evidente que no puedes, lo has intentado infinidad de veces y siempre acabas hablando de lo mismo. No puedes evitarlo, y jode mucho encasillarte ya cuando aun no te ha dado tiempo de empezar tu larga carrera de este mundillo.
Piensas en Chuck Palanhiuk y lo reconfortante que suena lo que escribe, porque es exactamente como lo harías tu si tuvieras un mínimo de talento.
Pero algún día llegará, en que después de asimilar todo lo que has hecho y pasado, te pares un momento, descanses y escribas una historia que más tarde se llevará al cine y en el cartel cinematográfico, debajo del título pondría algo como “Mejor que Kids” o algo así, ahora no puedo pensar en nada ingenioso para poner debajo de un cartel de una película. Pero por supuesto creo que incluso podría dirigirla yo, porque por mucho que me pudiera recordar a Kids, Ken Park o su puta madre, no dejaría que Larry Clark me la estropeara. Pero esperen, amo a ese hombre, no se equivoquen, pero tanto skateboard y tanto niño inadaptado que folla por aburrimiento a veces cansan. Aunque viendo sus películas no me extrañaría que algún día viéramos una película suya en plan adolescentes, sangre y mucho sexo. Y seguro que el asesino sería el padre de Telly, que cuando descubriera que su hijo tenía el sida y se lo iba pegando a todas las vírgenes del barrio, mataría a todos sus amigos en plan venganza chunga o algo así, seguro. Las películas de miedo ya no son lo que eran.

El problema de todo esto es que aún no sé qué quiero ser de mayor, hay tantas opciones y todas tan relacionadas entre ellas que no sé por cual decantarme primero. Otro problema de ser hermana (o hija, no sabría muy bien cómo definirlo) de la Generación X, como tantos otros, es la competitividad, que eso siempre ha estado ahí lo sé, pero ahora es distinto, somos la generación producto, la que no se dedica a un oficio, o está sentado en una mesa, (esos trabajos se volvieron secundarios en algún momento, no nos interesan, simplemente nos sirven como medio para conseguir Ipods, muebles de ikea, un café en el starbucks y unas copichuelas los fines de semana) sino que se dedica a vender su cuerpo, su carácter y sus gustos, la generación que quiere ser famosa y lo tiene al alcance. Todos tenemos algo que nos diferencia de los demás y eso es lo que hemos de explotar, a través de un blog, de un myspace o del youtube. Todos nos creemos únicos y somos los mejores, me hago fotos con mi reflex digital, me voy de compras al h&m y voy a ser una diseñadora gráfica que te cagas, aunque no sé ni para qué sirve eso, pero como mola decir algo con la palabra diseño pues mira. Eso, eso es lo que piensa y hace la mayoría de adolescentes capullos e inéptos. A veces tengo la sensación de que, suena tan hipócrita por mi parte, siendo yo otra persona producto, que me doy asco, pero luego me doy gracias al menos al ser consciente de todo lo que está pasando.
Pero habrá un momento que habrá tal sobrecarga de información inútil e innecesaria que no sé cual será el próximo paso. Todo estará tan inventado y reinventado dentro de unos años que no sé qué puede llegar a pasar, si habrá un momento de lavado y lucidez mental mundial y volveremos a empezar de cero y la moda será ser de piedra, tirar el portátil por la ventana y jugar al parchís o si la tecnología y la moda nos llevará a otro nivel de venta de nosotros mismos, o si todo lo que está pasando ahora no es más que una simple moda pasajera que durará unos años y que al final la gente se cansará de todo esto.

Y siempre que me paro a pensar en todo esto, en las generaciones, nuestras metas, las consecuencias de nuestra enseñanza y lo que hacemos con nuestras vidas, me acuerdo de El Club de la Lucha y como cuando Tyler y “Jack” están hablando en el lavabo y Tyler dice eso de “somos una generación criada por mujeres” bla bla bla, que no han pasado ni una guerra mundial, ni una depresión ni nada por el estilo. Y el problema es que los avances más importantes en nuestra historia se han dado justo en esos momentos de crisis y tensión cuando está todo y nada por perder. Pero nosotros no, somos la generación acomodada, la que siempre ha tenido todo hecho. Estamos mal acostumbrados. Y eso, en un futuro nos sabrá muy mal a todos y entonces será demasiado tarde. Aunque eso me hace meditar sobre otras cosas, las consecuencias de todo esto, pienso en nosotros como ese grupo de gente que no quiere hacerse mayor, que se cree adolescente aun teniendo 25 años, que vive con sus padres, que tiene un trabajo de mierda y que los fines de semana sale hasta caer muerto. Hay quien puede pensar “pues que vidorra macho, vives con tus padres, te lo dan todo hecho y los fines de semana te lo pasas de-puta-madre. Pero aquí, una persona tan optimista y tan feliz con el mundo piensa, y si el problema que tenemos es que somos tan infelices con nuestras vidas, con nuestro presente y nuestro futuro que solo podemos autodestruirnos poco a poco para sentirnos vivos? La generación peter pan al ataque, ponme un poco de tecno, píntame unas rayas y ya verás como esta noche mojo, mojo seguro que la droga me hace parecer guay.
Porque discúlpenme señores pero tengo la ligera sensación de que nuestra generación solo piensa en pocas cosas y una de ellas es la Srta. Droga. Eso. Ese es el problema. A mi parecer claro está. Que tengo la ligera sensación, cuando leo noticias como que el consumo de cocaína es cada vez más alto en adolescentes y que los porros es algo que ya, pues mire, como que algo ya normal, que la mierda de globalización, las películas (Requiem por un sueño y Trainspotting nos han hecho mucho daño, pero como amamos todos a Renton, Sick Boy y Spud…), los videoclips, internet, que todo esto va tan rápido, que la única manera de seguirlo, de sentirte parte de algo y de ser alguien es eso, mediante substancias estimulantes. Y eso es lo único que nos mueve. Y a veces a una, pues oiga, que le cansa, que no digo que otras veces no pero al estar acostumbrada a pasar a un segundo plano en esto de las reuniones sociales me doy cuenta, cuando algunas veces el único tema de conversación es “joder que morao el del otro día eh” “buah nen pues cuando fui a Ibiza” “buf, pues luego pasamos a pillarle al tio” que piensas, joder. Sí. Joder. Que el otro día me presentaron a un chico y de lo único que sabía hablar cuando nos quedamos solos era de eso. Y vale de qué puedes hablar a las cuatro de la mañana con un semidesconocido? No sé. A veces este tema me desmoraliza por completo.

El problema es que ya me estoy haciendo un lío y yo esto de expresar mis ideas ordenadamente no sé, así que es posible que en estos momentos ya vaya usted un poco perdido.

Dentro de unos años puede pasar algo, que los que ahora son postadolesencentes (contemos hasta los 30 más o menos, ese sería el momento, a mi parecer en el que despiertas del bajón y dices, coño qué estás haciendo con tu puta vida, pringao?) dentro de unos años pueden o ser unos perjudicados de la vida, o haber madurado pero tener un curro de mierda, sin estudios, sin dinero y sin una puta miieeerda. Y me gustaría pensar a veces que las generaciones futuras serán más lúcidas que la nuestra, pero algo me dice que no será así, qué se puede esperar de los hijos que nacerán de gente hecha polvo? Porque habrá dos grupos, los hijos de los perjudicados y los hijos de los que en realidad no tienen vida y lo más seguro es que sean de alguna secta adoradora de Dios y lo único que hagan sea matarse a pajas, tener remordimientos después y dedicarse al estudio de carreras aburridas y con mucho futuro, así que los hijos de estos serán igual o peor que sus padres. Y este grupo de superdotados sin vida dominarán el mundo y todo se volverá gris, matemático y sin vida y entonces la sociedad se volverá en plan V de Vendetta o 1984. O eso, o todo estará lleno de chinos, que por otra parte es muy posible que en algún futuro, el ejército de Mao extermine a las razas no asiáticas, y el mundo sea amarillo. Teorías más que posibles sobre lo que puede pasar en el Mundo el día de mañana.

Pero volviendo al tema y dejando las empanadas mentales para más tarde, sigamos. Y Aunque por otra parte, una servidora piensa, joder, es que si no lo hago ahora no lo haré nunca, si ahora no me tiño el pelo de azul, me paso en una discoteca toda la noche hasta las seis de la mañana y me lo paso chachi piruli no lo voy a hacer nunca. Pero qué voy a saber yo, solo tengo dieciocho años, aun estoy en bachillerato y no he vivido ni la mitad de mi vida. La conclusión que saco de todo esto?
Que aun no sé que ser de mayor, lo único que tengo claro es que necesito hacer arte, por mucho que parezca típico, romántico o bohemio. Porque una parte del arte dejará de ser así, que eso solo quedará relegado a los casos de Peter Pan más extremos que estudian bellas artes y adoran a Led Zeppelin, sino que el arte si no se considera ya así, será algo funcional, necesario y útil. Porque el ser humano que no ha tenido ganas de expresarse mediante fotografías, películas, cuadros, libros o lo que sea, miente, o tiene una vida muy triste. Es algo innato en el ser humano, al igual que comer, dormir y reproducirse. Solo que hay gente que lo sabe hacer mejor o peor, y espero, en un futuro no muy lejano, ser alguien que sabe hacerlo.

Tantas opciones y no sabes cuál escoger. Ser fotógrafa, diseñadora gráfica, tener mi propia revista, o hacer ropa y tener una tienda, diseñar camisetas, ser dj y pinchar buena música, escribir libros o tener mi propia columna, ser directora de cine, o directora de fotografía, tener mi propio negocio.
Tener un piso en Londres, Berlín, Amsterdam, París o tener uno en Barcelona. Saber francés, alemán y tener acento inglés (de UK, me parece más gracioso que el americano). Viajar mucho, muchísimo. Ser modelo (al menos para Terry Richardson). Conocer a mucha gente. Tener una hija.
Sé que algo de esto haré. Y si no, siempre puedo ser encargada de Zara.

Señores, qué momento de lucidez, perdonen pero me sorprendo de haber escrito tanto, que por fín lo conseguía y aunque os parezca un montón de mierda, pasito a pasito llegaré a algo.